Fragmento #32 - Más señales de Estrella

El móvil vibra sobre la mesa, donde descansan un vaso, con café y un paquete de cigarrillos. La pantalla del teléfono se ilumina y aparecen la palabras "Tiene un sms nuevo, de Sara". Deslizo mi mano hasta alcanzar la cajetilla y la abro muy despacio, saco el Cigarrillo y me dispongo a mi ceremonia religiosa. Sí, hacia mucho tiempo que no sentía su presencia en mi interior. Es un deleite sentirlo en mis labios y que su esencia inunde todo mi ser. Creo que estoy entendiendo a la santa monja auqella que se excitaba con la presencia de Dios... Yo con la de Cigarrillo.

Aprieto el botón verde del móvil, y el mensaje se despliega.
"Hola, mi amor. Te estuve esperando para ir a comer, pero no recibí ni una sola llamada tuya. ¿Te ha pasado algo?, dime que no es por mi culpa, porque no me lo perdonaría en mi vida. Te quiero".

Es la primera vez que me llega al corazón esas palabras. Doy un sorbo al café, y le contesto al mensaje.
"Hola, tesoro. No pude ir porque me tuve que venir a Sevilla, por cuestiones personales. Pero prometo ir pronto a verte. Te qui... - Borro lo último que iba a decir. - Besos".

Sara no ha cambiado nada en todo este tiempo, sigue siendo la misma niña que conocí através de Roberto. Debería tener un espejo delante de mis narices para ver la cara que se me pone cada vez que recuerdo cómo me declaré. Declarar, suena cursi, pero la quería y ahora... No lo sé, ella debe interesarme por el terreno de su vinculación con Sebas. Pero, ¿qué pasa con lo que ocurrió en Sanlúcar? Casi nos acostamos, sin tener en cuenta nada, fue como una necesidad de manifestarle... Mis sentimientos.

¿Y Estrella? A estas alturas ya debe de haberse olvidado de mí. No la culpo, la pobre parecía muy ilusionada conmigo, y yo también por el hecho de que gracias a ella iba a empezar una nueva etapa en mi vida, y porque me ha devuelto la ilusión por vivir - y que yo estoy malgastando en buscar a mis fantasmas. - Lo he hecho muy mal con ella. Espero que encuentre otro hombre que se merezca su corazón...

Vibra de nuevo el teléfono. Un sms... ¡De Estrella!
"Caballero, que ya veo que no quieres nada conmigo jeje, oye tiarrón, ¿qué te parece si nos dejamos de malos rollos? Te invito a una fiesta que mi amiga Marta celebra en Sierra Nevada... Contesta que sí, por favor. Besos"

Cigarrillo muere, no sé si es de la impresión del mensaje o porque su función en la Tierra ha finalizado. El café está hirviendo y me lo tomo casi de un trago. Estrella me invita a una fiesta, que celebra su amiga Marta... La misma fiesta a la que va a acudir el tal Pablo... ¿Son estas más señales? Porque de serlo solo me dicen que voy directo a una trampa. ¿Y si es una nueva oportunidad para estar con Estrella? Y si Dios es misericordioso, ¿por qué no acaba conmigo de una vez?